jueves, 10 de julio de 2014

María Teresa Panchillo (Poeta Mapuche) en serie de TV “Lenguas Indígenas de Chile” (video)



Sinopsis de la serie LENGUAS INDIGENAS DE CHILE, Producida por la Red de Derechos Educativos de los Pueblos Indígenas de Chile y Visualarte. Con el apoyo de UNESCO y USACH. Emisión por Canal 13C. Música y banda sonora original de Ernesto Holman.
Santiago, Chile – 2013.
MAPUCHE DUNGUN – LA PALABRA. Teresa Panchillo, Poeta Mapuche.
Captura serie lenguas de chile - maría teresa panchillo
Fuente: http://adkimvn.wordpress.com/2013/02/26/maria-teresa-panchillo-poeta-mapuche-en-serie-de-tv-lenguas-indigenas-de-chile-video/

SIN TÍTULO

(Gloria Lepilaf - Galvarino)


Volveré

A la lluvia azul que bañaba los bosques

Al delirio nupcial de las  cascadas

A soñar bajo la sombra del roble

A los surcos sembrados de cebada.

Volveré

A las cumbres nevadas con su furia de volcanes 

A descifrar el lenguaje del viento huracanado

A interpretar el misterio de los serenos raudales

A levantar los antiguos rostros petrificados.

Volveré

A contemplar las vertientes del cielo

A reanimar las voces de las doncellas

Al universo donde renacen los sueños


Y los deseos de libertad se despiertan.

SIN TÍTULO

(Gloria Lepilaf - Galvarino)



Otra vez aquí...

Con mi esperanza a cuestas...

Perdida en el universo de las ausencias.

Es breve la tarde...

Y tan inmensa...

La soledad me aprieta fuertemente...

Y la añoranza me golpea...

Esperaré...

Frente a la ruinosa luz de este ocaso...

Hasta sentir tu vivo abrazo

En las manos taciturnas de la brisa.

Sólo vine aquí...

Donde muere la tarde...

A concluir mi agonía...

Respirando el veneno de la angustia

De este amor que es profundo y es ambiguo...

Masticando la nostalgia hasta romperla...


Y bebiendo hasta el concho mis quimeras...

lunes, 19 de mayo de 2014

"A UN COSTADO DEL MAR" DE ERWIN QUINTUPILL




 Sobre la riqueza y la importancia de que ciertas lenguas perduren creo que no hace falta conversar, por eso no será tema para este artículo. Sobre mi admiración por la cultura mapuche y en particular por su poesía, tampoco hace falta que hablemos. Mejor pasemos directamente a la lectura de “A un costado del mar”, de Erwin Quintupill, un poeta fascinante y absolutamente recomendable.

Su poesía-tierra te sacude y te demuestra que el origen de este arte antiquísimo no puede estar muy lejos que donde surge la vida misma.

Erwin Quintupill

Erwin Quintupill ha publicado cuatro libros de poesía y está trabajando en una obra que reúne diferentes cuentos tradicionales (epew, para los mapuches). Por otro lado, es un estudioso de la obra de Anselmo Ranguileo, un importante poeta mapuche.

Además es el administrador de tres blogs que les recomiendo; en ellos podrán encontrar noticiascuriosidades de la cultura mapuche de una exquisitez impresionante y poesía de autores que pertenecen a este pueblo.

La obra de Quintupill todavía no se ha editado en papel pero algunos de sus poemarios se encuentran disponibles para leer a través de Internet. Tal es el caso de “Las distancias“.

Erwin, además de ser un poeta maravilloso, es un hombre comprometido con su entorno. En su casa acoge a perros sin hogar: vagabundos que llegan a su vida en busca de afecto y calor, y que lo encuentran. No se pierdan las preciosas y tiernas historias que nos cuenta en su blog sobre cada uno de estos amigos con los que comparte su vida.


 
Foto: Carina // Mingako Kultural

El gran viaje

La poesía de Erwin se nutre de una energía que fluye desde tiempos memoriales y que lleva consigo un bagaje invaluable al alcance de aquéllos que quieren beber de la tierra. Equipaje que el poeta no ignora, más aún, al que se suma, del que se siente parte. En cada uno de sus poemas podemos encontrar guiños a leyendas o historias que convierten cada situación en un motivo para crecer, para observar, para aprender.

Toda la obra gira en torno al gran viaje. Ese último instante que para la mayoría de nosotros tiene un matiz negativo pero que los mapuches esperan sin miedo; según sus tradiciones es un momento en la vida igual que cualquier otro y gracias al cual la existencia es posible. La armonía interior y la cercanía con la historia del pueblo hace que el miedo no tenga lugar y que puedan sentir que ese instante sea uno más, que los mantiene unidos al resto de almas del mundo. Este rasgo se hace muy presente en las ceremonias mapuches, donde la cercanía con aquellos que formaron parte del pasado y que están presentes de una u otra forma en la realidad, hace posible la paz.

La luna es un elemento primordial de la cultura y algunas leyendas apuntan a que es la que ilumina el camino de las almas cuando los cuerpos dejan esta vida. Hay una serie de poemas donde ella aparece irremediablemente, y hay uno que me gusta especialmente y dice:
«A un costado del mar» de Erwin Quintupill

La riqueza del lenguaje

Una de las cosas que más me ha maravillado de Erwin es el uso de ciertas sutilezas lingüísticas en su escritura. Me encontré con un lenguaje que se nutre del mundo onírico, de las leyendas y de la realidad de una forma fluida y decidida; y eso me ha gustado especialmente.

Gracias a su buen manejo de los colores y los sonidos en la escritura nos traslada a un espacio donde cualquier elemento por sencillo o cotidiano que sea, se vuelve sublime. Además nos obliga a cambiar de perspectiva; a arrancarnos de nosotros mismos y vernos como parte de un todo. Supongo que es la única forma de percibir sus palabras, de escuchar de dónde vienen y de comprender qué efecto están causando en lo más hondo de nosotros mismos.
«A un costado del mar» de Erwin Quintupill

El ciclo de la vida

El ciclo de la naturaleza ilumina estas páginas de tradición y de vida. Se percibe una esperanza nata detrás de la tristeza y de los sin sabores que a veces nos depara la vida. Y las palabras parecen arrastradas, proferidas por el mar: el agua que nos conecta con lo más primitivo, con lo más nuestro. Creo que es una lectura importante para redescubrir la importancia de nuestros actos en lo que nos rodea, porque todo tiene consecuencias.

Creo que es inevitable ver el contacto con la vida, con la tierra, con los sueños, con lo maravilloso, con lo esencial, en la poesía mapuche que surge de las entrañas de la misma tierra, con la que todos de alguna forma estamos conectados. En Erwin lo maravilloso habla y se presenta ante nosotros como un inmenso universo de colores claros y luminosos, como la luz de la luna.

Dice Erwin en uno de sus versos que el día que deba regresar a su casa, cuando le toque nacer nuevamente, “la tierra y yo haremos un acto final de rebeldía del que nadie podrá separarnos” y agrega que las letras de su infancia volverán a la tierra para surgir en otra boca, en otras manos. En este poema reside toda la magia de las canciones y la poesía mapuche que es escrita desde la tierra y por y para ella; porque desde mi punto de vista pocas naciones han comprendido tan a fondo lo que significa nuestro paso por este mundo y han sabido conectarse de forma tan directa y comprometida con la tierra como el pueblo mapuche.

Todo esto es lo que van a encontrar en “Al otro lado del mar” y espero que mucho más. Porque lo bueno de la poesía es que nos guarda un pequeño tesoro a cada uno de nosotros; tesoros que solamente nuestros ojos son capaces de ver.

Por Tes Nehuen


Lee todo en: «A un costado del mar» de Erwin Quintupill > Poemas del Alma http://www.poemas-del-alma.com/blog/especiales/costado-mar-erwin-quintupill#more-36051#ixzz32JPnsiOL

lunes, 7 de abril de 2014

RECURSO PEDAGÓGICO (NORA GUEVARA GARCIA)

Nora Guevara García es profesora de Lenguaje. Me ha hecho llegar la siguiente actividad, para realizar con estudiantes de educación básica. (No indica nivel (curso)).



GUÍA ELEMENTOS DEL MUNDO NARRADO (NARRADOR, MODOS NARRATIVOS, TIPOS DE MUNDO, FRACTURAS TEMPORALES)

Contenido: Elementos del género narrativo.

Objetivo: Aplicar conocimientos, estrategias de comprensión de lectura y redacción aprendidas en aula y seguir instrucciones.

Actividad: Desarrollan guía con nota apoyándose en su cuaderno.

Nombre __________________________________  curso _______   fecha _________

Instrucciones

1. Numera los párrafos del relato para facilitar la posterior revisión.
2.  Recuerda  que  los  números  entre  corchetes  corresponden  a  palabras  definidas después del relato.
3.  A  medida  que  lees  destaca  la  acción  principal  o  el  tema  de  cada  párrafo  según corresponda, lo cual facilitará el trabajo con las preguntas de selección múltiple.
4. Respalda  las preguntas de  selección múltiple encerrando en una  cuerda  las marcas textuales y el número de pregunta a la que corresponden.

(AQUÍ VA EL RELATO)
Ver primera parte de PERIMONTUY TA ÑI LAMGEN en este mismo blog. (Etiqueta Maribel Mora).

I. Ítem de selección múltiple  

1. ¿Qué tipo de narrador se presenta en la introducción y el cierre  del relato leído? 

a. Omnisciente 
b. Testigo 
c. Observador 
d. Protagonista 

2. ¿Qué opinión expresa respecto al castellano el narrador? 

a. Es el idioma que escogió emplear en su relato por su variedad léxica. 
b. Permite expresar con claridad el significado de las experiencias. 
c. No es capaz de expresar el profundo significado del concepto perimontun. 
d. Es un lenguaje que le parece amargo y poco preciso para su relato.  

3. ¿Cuál es la disposición del tiempo en el relato leído?

a. In media res
b. In extrema res
c. Ad ovo
d. No se puede determinar

4. La focalización o grado de  información que el narrador posee  respecto a  los sucesos de la historia que relata es

a. Interna
b. Externa
c. Cero
d. Incluye a y b

5.  Respecto  a  los  quiebres  o  fracturas  temporales,  el  relato  se  basa  de  forma  en predominante en el empleo de

a. Flash back
b. Racconto
c. Flash forward
d. Premoniciones

6. El tema del relato es

a. Cosmogonía mapuche
b. Los perimontum
c. Infancia mapuche
d. Recuerdos de paternidad

7. De acuerdo al relato los perimontum son

a. experiencias que incluyen visiones verdaderas que quiebran la cotidianeidad.
b. cuentos inventados para enseñar  a los niños para que no se alejen de los mayores.
c. mitos mapuches que nos hablan acerca de sus dioses y de cómo se manifiestan.
d. seres fantásticos que visitan a los mapuches para causarles daño o avisarles peligro.

8. ¿Cómo se puede saber si un perimontum es malo?

a. Algo está en un lugar que no debe estar.
b. Se manifiesta en el cielo.
c. Los perros se ponen mañosos si ocurre.
d. Aparece en los velorios de los muertos.

9. ¿A qué se refiere la palabra  GEN empleada en el segundo párrafo del texto?

a. Vida
b. Información genética
c. Energía
d. seres que aparecen

10. ¿Qué tipo de narrador se presenta en el desarrollo del relato?

a. Omnisciente
b. Observador
c. Protagonista
d. Testigo

11. De acuerdo a  lo  leído, quién es el hablante  lírico  o  la voz del poema  inserto en el relato

a. El narrador
b. Madre del narrador
c. Padre del narrador
d. José, a quien hicieron el macitun

12.  El  fragmento  del  relato  ubicado  bajo  el  poema,  nos  permite  inferir  que  el  pueblo mapuche

a. teme a las serpientes.
b. respeta profundamente a la naturaleza y no daña a las serpientes.
c. es humilde y se disculpa siempre que comete errores.
d. está conectado con las fuerzas naturales y las respeta.

13. De acuerdo a la atmósfera del relato y a la forma en como se presentan los hechos, el tipo de mundo de este relato es

a. fantástico
b. cotidiano
c. mítico
d. onírico

14.  ¿En  cuál  de  los  siguientes  perimontum  se menciona  la  presencia  de  testigos  que acompañaban a quien relató lo vivido?

a. Una gallina que está donde no debe estar.
b. En el fallecimiento de  Miguel Tropa.
c. Hernán Raguileo ve desde lejos  fuego en la era de su tío.
d. Aparece en el cielo un uyuce con forma de tizón.

15. El modo narrativo presente en el párrafo ocho es

a. Directo
b. Indirecto
c. Indirecto libre

Léxico contextual
16. asuntos
17. advertir
18. precaución
a. problemas
b. temas
c. apariciones
d. relatos
a. prevenir
b. enseñar
c. insinuar
d. aconsejar
a. miedo
b. equilibrio
c. prudencia
d. astucia

19. Qué  ___________________________________________presenta el relato leído?

Fila A tipo de narrador
Fila B modo narrativo
Fila C tipo de mundo
Fila D quiebre en el tiempo

Ver blog de Nora Guevara

http://noraguevaragarcia.blogspot.com/2014/04/guia-elementos-del-mundo-narrado.html

sábado, 5 de abril de 2014

NONANTSIN


(Martín Jacinto Meza, poeta nahua)

Nonantsin te, on moxtsintle uan chante ipan nixtololojuan,
siuatototsintle uan kualtsin tlatsitsilitsa ipan se okualkan.
Yajua te melauak kualtelotsin,
tlanesyotl tlacha ken nonantsin
niman xochimej tlachaj ken nonantsin.
Iyemankatenxipaliouan
tlacha ken ome chipajkej atlajtin
uan uajyektokej ipan se tepetsintle sa xoxoktik.
Itsopelik niman ikuikatlajtoluan
noyankuilia mojmostla, notlapaluiya.
Ompa te oniuel nikektlalia
xochitlajtoltsintle,
aman te kuak nitlajtoua,
notlajtoluan nojtsomaj, nomiyakilia.

Yajua te meluak kuajle nantle.

Imauan temakaj chikaualistle,
kintokaj ipan tlakatsitsintin intsontekouan,
pipitikej xinaxtin uan tlacha ken tlanemililtin.
Tlanemililtin uan kiyolchikauaj itlajtoltsin tlaltipaktle,
uan kinyolchikaua kojtsitsin intlajtol
niman kinyektilia tototsitsintin inkuikalis.

MI MADRE
(Martín Jacinto Meza, poeta nahua)

Mi madre, es aquella nube que vive en mis ojos,
jilguero hembra, llena de cantos de esperanza.
Ella es hermosa,
ella es el amanecer
y las flores se parecen a ella.
Sus delicados labios
son dos transparentes ríos
acostados sobre la montaña.
Sus dulces y melódicas palabras
se renuevan, se pintan.
Es ahí donde he aprendido el secreto
de la palabra florida,
es por ello que a veces cuando hablo,
mis palabras se tejen, se reproducen.

Por eso es una buena madre.

Sus abrazos dan fortaleza de vida,
siembran en la memoria de los hombres,
pequeñas semillas parecidas  a las ideas.
Ideas que fortalecen el lenguaje de la tierra,
el hablar de los árboles
y el suave canto de las aves.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.

Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.

ESPINAS

(Cristina Urtizberea - poeta patagónica)

A partir de las mujeres que murieron asesinadas
por la Masacre de Trelew y para las que pese
a todo el espanto, siguieron y siguen luchando.

Sangre.
Temerosos los montes
Se llenan de espinas
De espinas nos llenamos
Nosotras también.
De espinas y poesía
Para no morir.

Seca y hecha polvo
Vuela la sangre
Libre al fin del fin.

De este lugar
Tosco sólo vio la cárcel.
Cárcel cruel y chicas muertas
Al filo de la libertad.

Dónde aún están
Los huesos del peón
Del otro peón, de los de acá y ahora
De la tierra
Como la sangre triste
De la gente ausente.

Duros los cuerpos
Que atraviesan el frío
Y soportan la lucha
Y el cruel trabajo.

Crueles los corazones.
Que venden como turismo
Los restos de otra masacre.

Seca la sangre y tierra
Libre al fin del fin.

El grito
ya no aguanta en la cárcel
Del silencio.
Del frío
Que cuando golpea retumba en la sangre.

También se secará esta sangre
Y volará entre los barrotes
Y aún quedará todo.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.

Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.

MI CAMINO

(Jeanette Huequeman - Puerto Montt)

El clamar a mis raíces me emociona
las lágrimas rozan mi cara
el grito de la sangre,
que en mis venas corre,
presurosamente fuente de vida.
Cómo no sentirme orgullosa
si me veo en mi pueblo,
soy una más,
ocultándome tras las paredes,
si no es un pecado tener
sangre guerrera.
Un día se levantarán las olas
sobre este pueblo,
y los guerreros asomarán sus miradas,
escondidas por mucho tiempo,
no sientas vergüenza,
verás que los días de gloria llegarán
y todos seremos uno,
hermanos para siempre,
epe afiche fey kuruy ñi mamputun,
ka guidu chum fey picicuruy
catumu mapuche,
al amanecer el viento me acaricia
y soy libre como la brisa
otro hermoso lugar de la gente de la tierra.

De: http://antologiaabsoluta.blogspot.com/

ESCARAS

(Palo Ayenao - Temuco)

John le pegaba todos los días a su esposa.
Era su rutina.
Llegaba borracho y los puños entraban en acción.
Ella no se atrevía a denunciar.
Era inmigrante y apenas entendía el inglés.
Se llamaba Lorena.
No conocía a nadie en ese país.
Sólo a su esposo que día tras día tatuaba su cuerpo
a  golpes.
Un dia John tomó más alcohol del que habitualmente
su cuerpo resistía
y le pegó demasiado a su esposa,
después la violó,
penetrándola una y otra vez.
Lorena estaba un tanto inconsciente,
había que resistir los embates del dulce marido.
Al rato John acabó,
 exhausto se tomó la última cerveza
y durmió como un bebé
toda la noche.
Lorena entonces quiso terminar con aquella situación.
Fue a la cocina y encontró un cuchillo carnicero.
Despacio entró en la habitación matrimonial,
bajó el calzoncillo de su marido,
tomó  su miembro
y de un certero corte lo cercenó,
luego lo arrojó por la ventana
y después entró en shock.
Hizo las maletas, se fue lejos,
sin dinero, sin rumbo, sin nada.
John despertó de su borrachera y sintió
que en su cuerpo algo faltaba.
Se plantó frente al espejo
y se dio cuento que su hombría había sido arrancada.
Hay que reponerla inmediatamente-pensó-
volver las cosas a su lugar.
El pene, devenido en falo, devenido en símbolo patriarcal,
no se puede arrancar
porque es la ley natural que decidió la sociedad en su conjunto
(cuyos representantes eran sólo hombres).
Todo debe seguir como históricamente ha sido.
Apresar a la esposa y coser el miembro es lo justo.
Y así lo hicieron.
Pero la esposa ahora ex esposa finalmente salió libre.
Jhon y Lorena Bobbitt nunca vivieron felices para siempre.
¿Cuántas Lorenas Bobbitt viven actualmente entre nosotros?
Supongo que millones,
y millones de Jhon Bobitt,
que gracias a su mutilación
pudo por fin ser famoso
en la industria del porno.
Allí despliega sus artes amatorias,
 con su zurcido pene

que al parecer funciona igual que antes.

En: "Flúro defintivo"

jueves, 3 de abril de 2014

PERIMONTUY TA ÑI LAMGEN




Mabel García (presentadora) y Maribel Mora Curriao
Fotografía: Erwin Quintupill

Por Erwin Quintupill
quintupillerwin@gmail.com

Habiéndome hermanado nuevamente con el mate amargo, me pongo – otra vez – a pensar en eso del perimontun[1]. Cuando niño supe del miedo de ir por los rincones, solitario, con la posibilidad de tener un avistamiento con lo desconocido. “Visiones” le llamaban en castellano; pero, como casi todas las traducciones, apenas se aproxima al significado de la experiencia.

Mamá y papá solían hablar de estos asuntos, principalmente en las horas del comienzo de la noche, junto al fogón, mientras mateaban o simplemente conversaban. A ratos me advertían sobre los peligros; pero, jamás me dijeron que había que ir con temor, sólo con precaución. No debes entrar como loco a cualquier sitio; todo tiene un gen[2]. Y si llega a ver algo extraño; por ejemplo, una gallina en un lugar en que no debe estar; entonces, tiene que alejarse y avisar; porque el perimontun puede ser malo y en ese caso hay que hacer algo.

Se dijo que esa noche en que a José le hicieron macitun[3], hubo “visiones” de luces; que desde el alto bajó una bola de fuego o de luz y rodó hasta la “laguna”[4]. Se contó que Miguel “Tropa” se apareció a su gente, después de haber fallecido, que estuvo en las proximidades de su casa. Eso debió ser también una forma de perimontun, en este caso el alwe[5] del finado. Mi padre me dijo que una tarde de verano, en sus años de juventud y en época de cosecha, vio un uyuce[6]. Tiene forma de tizón, me contaba o como de un cigarro grande que avanza no muy rápido[7]. Fue allí, “al otro lado”; apareció desde allá, del lado este y avanzó hacia “Millacoy”[8] y por allá se perdió.

Era un cherufe.
mis ojos despavoridos
lo vieron
en una tarde de verano
cuando yo era niño.
(…)
Era la hora del crepúsculo,…
(…)
Una descomunal cabeza de serpiente
con las fauces abiertas,
como tratando de alcanzar su presa…



En el monte, especialmente en los quilantales[9] o entre los matorrales puede haber cinifilu[10]; por eso, hay que entrar  con cuidado a esos lugares, y si llega a ver uno, debe retirarse rápidamente y pedir disculpa por haber entrado así, aunque ande haciendo algo de trabajo.

Muchos años después, me han contado otras formas de avistamientos: “En el junquillar, en el puente que hay frente a Eugenio, para pasar a la vega, donde Rigo, una vez vi pasar un perro blanco lanudo. Se perdió de repente. Nadie tenía perro de esa clase (por aquí).

“En ese mismo lugar, en otra oportunidad, vi una pareja de carabineros, conversando. Les brillaba la gorra. (Marta Canales, mayo de 1994).

Por su parte Herman Raguileo (mayo de 1994) narraba: “Otra vez, fue que yo me vine por Kuraliwen, en el alto. Vi, desde la tranca, en la era de mi tío Pablo un fueguito chico que alumbraba. Me subí arriba de la tranca, para ver mejor. Había pensado ir (hasta) allá mismo; pero, pensé en los perros mañosos de mi tío y que podrían pensar quizás qué cosa si me vieran allí. Así que no fui.

Después, ellos me contaron que más o menos en la misma fecha, habían estado limpiando (la) era. Después que se fueron para la casa, de repente vieron (a) varios niños chicos que estaban limpiando también.”

Por mi parte, mi primera experiencia con lo desconocido fue cuando tenía aproximadamente unos 13 años. Fue una noche de verano, como a las 11. Vi en esa ocasión una luz de comportamiento extraño, inexplicable. Se movía lentamente, de modo sinuoso y pasaba por encima de un cerco muy alto, formado por kila, koliwe[11], otros arbustos y árboles como hualles[12] y boldos[13]. Era parte de ese cerco, también, una empalizada de talla mediana. ¿Qué puede movilizarse de ese modo? Es cierto que se trataba de una luz; pero, no estaba conducida por humano alguno. ¿Acaso existe un ave que pueda portar semejante lumbre? Estaba acompañado de otras dos personas de mi misma edad que también la vieron. Avisamos a las personas mayores que estaban en el interior de la casa. Le indicamos el lugar y nada vieron; pero, nosotros sí observábamos claramente lo que estaba aconteciendo. Tuvimos miedo.

Posteriormente, he tenido otras experiencias del mismo tipo; pero, nada tan espectacular como aquella. Y perdí el miedo. Ya crecido, me he quedado largo tiempo observando a la distancia. Nunca he logrado una explicación. En mi modo lógico no he hallado la comprensión para tales sucesos, aún. A veces pienso que la energía de la materia tiene formas insospechadas de pronunciarse. También supe que los machos culebras se agrupan, se “apelotonan” alrededor de la muchacha deseosa y por eso – creo – que el impacto no será tan grande cuando me encuentre sorpresivamente con un cinifilu.




Tales han sido mis experiencias anteriores al PERRIMONTUN de Maribel Mora Curriao (Konünwenu. Editorial Indígena de Chile. Santiago de Chile, 2014). ¿Por qué llamaste de ese modo el libro?, le pregunté esa tarde lluviosa del lanzamiento en Temuco. Tuve sueños, me explicó. Finalmente, llegué a la construcción de este libro, agregó.

Lo cierto es que “Perrimontun” es un conjunto de poemas un tanto desgarradores, surgidos de la memoria, de aquellas conversaciones con sus mayores. Así, el libro se transforma en una narración colectiva, al estilo de lo que ocurre con los epew y otros tipos de relatos en el mundo mapuche. Hay también reflexiones desde la vida propia, la de ella, la que comparte con las demás mujeres.

A algunas como yo
la vida se nos hace nudos
se nos atragantan las palabras
y nos corroe el tiempo
de la luna.

A algunas como yo
se nos prohíbe
ser lo que somos
porque entonces
el mundo temblaría
los hijos           nuestras casas
los cimientos               las religiones.

Tiemblo al leer estos últimos versos. Ojalá esta poesía sea premonitoria.

En el desconocimiento, siempre creí que la poesía de Maribel era algo distante a mis asuntos. Ahora, comprendo que no es así, que de algún modo hemos compartido las mismas historias.

Hace años atrás participé de un proyecto con niños que tenía como fundamento creativo el encuentro con los relatos (Afunalhue, 2007. Comuna de Villarrica). En esa ocasión me enteré que sus antepasados – los de los niños del Proyecto – llegaron hasta allí huyendo de la furia chilena, desde algún lugar de San José de la Mariquina. Don Felipe Paluan, a esa fecha (2007) con 86 años, nos contó: Iban a ser muerto por los wigka. De ahí se corrieron mejor, porque quedaban muy chicos de tierra… y como por acá había tanta tierra desocupada. Llegaban (y) se instalaban, no más. No había ningún problema. Después pasó la Radicación y sacaron tierra. (…) (Mi papá) hizo población allí en el bajo. Actualmente, está ahí mismo un hermano. (Venían) de San José (de la Mariquina)… Por allá hay familia Puelpan y Cariman. Nosotros, netamente el apellido era Cariman. Finao mi tío, el mayor de todos, ese cambió el nombre…” Llegaron en carretas y caminando, a lo largo de días y noches, avanzando en busca de un sitio seguro para sus hijos y ellos mismos… huyendo. Pero, en Wajmapu existían sitios aún en donde guarecerse.

Y Maribel o – mejor dicho – sus antepasados, entre ellos el viejo peñi Manuel Curriao, presente en el acto de lanzamiento, cuenta:

Entonces la luna alumbraba nuestras cabezas, Mankekura nos cobijaba en las quebradas y los ñirres, nuestros hermanos, guardaban nuestros miedos. Pero la semilla se volvió gusano y la noche un zumbido oscuro en nuestra cabeza, cuesta abajo con nuestros sueños, huimos de las montañas. Los piam y los antiguos nütram de los abuelos  se oyeron con fuerza mientras marchábamos. Nosotros cantábamos para no escucharlos, soñando dichosos los años venideros. Torcazas y tiuques nos acompañaron desde lejos, los graznidos del güairao coronaban el desvarío.

Por todo el nag mapu, hermanos,
caminaremos.
Por todo el nag mapu, hermanos,
caminaremos.
Haremos nuestras rucas
a la sombra de un canelo,
Por todo el nag mapu, hermanos,
caminaremos.

Criaremos wakas y ovejas,
sembraremos trigo
junto a las palabras.
Secaremos changle
junto a los miedos.
En otros valles,
en otras tierras.
Nuestros hijos
buscarán el voki,
trenzarán nuevos sueños.
(…)

Así fue como Maribel llegó a nacer, para ser la mensajera de la historia pasada, para contarle a su descendencia la memoria de los hombres y mujeres de la montaña.

Pues, y no digo más; porque no soy crítico de oficio. Esta larga nota habla de la impresión que me causa la lectura del primer libro de poemas de mi lamgen. Es también una invitación a buscarlo y leerlo. ¡Hay tantas formas de aprender a vivir! Hace años atrás un grupo de estudiantes adultos me decían que la poesía era algo “fome”, “aburrida”, “romántica”… Y me di cuenta que la mayor parte de la gente que ha tenido la mala suerte de haber sido domesticada por la escuela chilena, tiene esa impresión del lenguaje poético. Entonces, les presenté una selección de poemas de autores chilenos y mapuche y quedaron sorprendidos. No ocultaron su impresión y se mostraron atentos, principalmente “extrañados” por la diversidad de temáticas que abordaban los escritores que les presenté. Por eso, no ceso en mi empeño.

¡Ah! Y ¿cuál(es) es(son) el(los) perimontun de la autora? Pues, lea el libro y lo descubrirá… y los suyos, probablemente.

Buenos sueños a todos/as.




Maribel Mora Curriao
Fotografía: Erwin Quintupill


[1] Perimontun: Avistamiento de algo desconocido.
[2] Gen: Energía que “mueve” a los cuerpos. (Entiendo el movimiento como una de las propiedades de todo ser viviente y también como el cambio de posición en el espacio, desde algún sistema de referencia o lugar de observación).
[3] Macitun: machitún.
[4] “Laguna” o Launa: Se trata de un majin (mallín) grande, al que la gente lama de esa forma.
[5] Alwe: Energía o espíritu que deja el cuerpo y que no se aleja como normalmente debe ocurrir; entonces, permanece en las proximidades. Se le debe hacer una ceremonia para que se vaya y descanse definitivamente en “la otra tierra”.
[6] Uyuce: Uyuche.
[7] Anselmo Raguileo, hermano menor de mi padre, escribió un poema que llamó El Cherufe, en que narra un suceso semejante. (Ver: En: García, Mabel y Galindo Sylvia; Poesía mapuche. Las raíces azules de los antepasados. Editorial Florencia, 2004.
[8] Millacoy: Comunidad ubicada al oeste de Saltapura. Hasta la Radicación formó parte de un mismo lof junto a Saltapura y otras comunidades aledañas.
[9] Quilantal: Conjunto de kila (Chusquea cumingii).
[10] Cinifilu: Conjunto de culebras que forman algo semejante a cini (chini), un cesto bajo y amplio confeccionado con tallo de enredadera, por ejemplo de kopiwe u otra trepadora semejante.
[11] Koliwe: Chusquea couleu.
[12] Hualle o Koyam: Nothofagus oblicua.
[13] Boldo (Folo): Peumus boldus.

jueves, 27 de marzo de 2014

OTRO POEMA DE MARTÍN JACINTO MEZA (NAHUA)

TLAXKALSIUATSITSINTIN
Martín Jacinto Meza, poeta nahua

Siuatsitsintin noxochitlakentsiaj,
noyektiliaj,
nopetsouaj.
Impan inlomoj,
impan imastlakapaluan,
sa nokalanijtiuej insonsaloluan,
sa tsotlantiue intlapalcintas.
Yajuamej te tlaxkalsiuatsitsintin,
yajuamej kipakaj innextamal,
youej ipan molino ontlakuechouaj.

San yejko intlakualkalijtik
peuaj kiyemaniaj tixtsintle.
Kimimilouaj ipan inmetlatsin,
kinyeualchijchiuaj
ken se ayeualmanajle,
ken se mestsintle.
Kema konsouaj ipan sokikomajle,
komajle uan ikxitsitsiuan tekauintokej.
Tlaxkaltsitsitntin peuaj iksej,
sa yejyektin sa uejueimej,
kema nixajokue,
noponatsouaj ken akuakuamej kuak yokualankej.


MUJERES DE TORTILLA
Martín Jacinto Meza, poeta nahua

Visten sus atuendos floridos,
se embellecen,
se peinan.
Sobre sus espaldas,
sobre sus hombros
cuelgan trenzas adornadas con cintas coloridas.
Son las mujeres de tortilla,
son las que lavan su nixtamal,
son las que van al molino a hacer la masa.

Al llegar a la cocina
comienzan por ablandarla,
la mueven  y masajean sobre el metate,
hacen círculos con ella,
se parecen a una laguna,
o la redondez de la luna.
Tienden la tortilla sobre el comal de barro,
comal de pies de fuego.
Las tortillas comienzan a formarse
bellas y grandes,
levantan su pestaña,
se inflan como sapos enojados.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.

Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.

DOS POEMAS DE ZAHARA HASNAUI

DIEZ Y UNO
Por Zahra Hasnaui, poeta saharaui

Diez años y un día
en este dilatado desvelo
mirando sin ver.

Diez años y un día
afanándose la Ignorancia
en velar la Razón.

Decidle,
que no reproduce
el ojo su imagen.
Que mis dedos
en el aire acarician
su voz, su andar
torpe y gestos.
Que trazan su nombre
de derecha a izquierda
y de izquierda a derecha
lo vuelven a trazar.

Decidle,
que, temblorosos,
no olvidan la abultada
mudanza del tiempo.

Decidle,
que aunque
raptara el lienzo
yo ya bebí su sonrisa
y me embebí por siglos.

Dedicado  a  una  mujer  saharaui  que  pasó  un  año  en  la  cárcel  y  luego  otros  diez durante  diez en  la  mazmorra  de  Kalet  Mguna. A  las  madres  saharauis, desaparecidas durante años en mazmorras marroquíes, a las infancias robadas.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.
Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.

VOLUNTAD
Por Zahra Hasnaui

A Aminetu Haidar

No pudo morder
la mentira
la geografía inmensa
de tus alas blancas.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.

Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.

MUJER INVISIBLE


Por Mohamed Salem Abdelfatah, (Ebnu), poeta saharaui

Como que el tiempo me sobra
puedo quedarme dormido
hasta el mediodía.
Levantarme.
Y luego pensar que nunca
he visto sus ojos
ni he escuchado su risa
ni le he escrito versos.

Pero al final
de cada noche
ella estará perfumando
la cama cansada
y yo vendré
a beber de sus ojos
a besar su risa
y a recitarte los últimos versos
que escribí a una mujer invisible.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.

Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.

SIUATLAJTSONKETL


Martín Jacinto Meza, poeta nahua

Nonantsin yope tlajtsoma;
mojmostla okualkan
ika isokiixtololojtsitsiuan,
imatlayoltsin niman ikxiokojuan,
kijitsoma pakilistle ken itla soyatsintle.
Kuak yeyas ontekitis
nixamijteua, nopetsojteua.
Yo sa uetskati  ken kana ajakatsintle,
tikijtosia kekeloua ipan ixijlan.
Kuak neyajmantle kineke itech nopepechos,
nonantsin peua nijtotsia, tsijtsikuine niman uetska.
Kuejuestkilia on lamajtsin nejmankamayantle.
In lamajtsin san ontlacha niman kisa notlaloua
ixmejmetsijti ken kana tikijtosia,
ipan ikuitlapil uajpilkati se chiche.

Najua te, san nikmatlaxkalouilia itekiyotsin nonatsin.


LA ARTESANA
Martín Jacinto Meza, poeta nahua

Mi madre se ha vuelto una artesana;
todas las mañanas
con sus ojos de barro,
manos de maíz y pies de ocote,
teje la alegría como si lo hiciese con la palma.
Antes de cada labor
se maquilla para lucir
sonriente como si la transparencia,
le hiciera cosquillas sobre la cintura.
Cuando la tristeza intenta acercarse,
mi madre baila, brinca y ríe.
Se mofa de aquella pobre arrastrada.
La tristeza, con los ojos salidos,
la mira y corre espantada como si detrás de ella,
viniese un perro mordiéndole la cola.

Yo, sólo aplaudo y celebro el trabajo de mi madre.

En: Susperregui, Xavier. Mujeres en la Historia. Volumen II. Biblioteca de las Grandes Naciones. País Vasco, 2013.

Ver: bibliotecadelasgrandesnaciones.blogspot.com.